lunes, 12 de marzo de 2018

Primer mensaje

Tan alto soñamos
que el mundo nos escuchó.

Y, pase lo que pase, aquí seguiré.
Sonriendo.
Esperando.
En el andén, donde me dejaste.

Anhelando que me beses con los nervios de la primera vez,
con las ansias de cada despedida,
con la ternura de tus buenos dias
y con la pasion de las buenas noches.
Que venga cargado con las horas de inquietud ante la proximidad de verte,
y también con el sentir de la soledad al sentarme en el vagón.
Y con la sonrisa al intuirte esperandome en llegadas,
y con el interminable abrazo del nos vemos pronto.
Pero, sobre todo, con la tranquilidad de que nunca llegará el adiós.

¿Y si todo eso ya tuviera fecha de caducidad?
Ha sido bonito,
pero tengo la certeza
de que ahora llega lo mejor.